TEJEDA A TODA MÁQUINA

Mauricio Tejeda puede en este 2016 cumplir su gran sueño, de jugar en el club de su barrio, con un poco de ayuda del destino, podrá desempeñarse como conductor del tren de las sierras y defensor de Los Andes.

Por Emanuel Moya
Edición: Leonel Altamirano

A Mauricio Tejeda lo llaman en el barrio "Bucho" y su apodo es tan conocido como su amor por Los Andes. Es que, desde chico, estuvo cerca de la cancha y hoy logró sacarse un peso de encima y poder entrenar en ese estadio que lo vio caminar una y mil veces como hincha.

"La verdad que tengo muchas ganas que se me dé, más que nada por el horario del trabajo que no lo tengo confirmado aún, pero sería casi una realidad que voy a jugar acá", nos cuenta Mauricio sobre la posibilidad de jugar, y continúa: "Me sentí feliz al llegar a la cancha, ver varios amigos y gente conocida del barrio que me alentaba. La verdad no tiene precio y era solo una práctica, no me imagino si se da de jugar ese primer partido".

Jugador de Avellaneda, Las Flores, Argentinos Juniors, entre otros, Mauricio Tejeda tiene una vasta trayectoria, pero todos saben cual es su casa y así lo refleja: "La verdad que en los clubes que me tocó jugar me atendieron muy bien. Gané cosas y siempre defendí cada remera a muerte. Hoy, poder entrenar en Los Andes es un sueño, por que es el equipo del que soy hincha.  Siempre pienso que si en los otros equipos jugué a muerte, en este dejó la vida y mucho más".

Ahora, su vida transcurre en las vías y en las canchas y nos cuenta sobre lo que es ser motorman: "Hay dos posibilidades, una es que viaje a Cosquín todos los días y otra a Villa María, dos veces a la semana. Recién el primero de febrero voy a saber que me toca. Si es Cosquín, puedo cumplir mi sueño, porque me va a permitir entrenar todos los días. Se que Dios me va a dar una manito"

A su padre le dicen "Pepa", es conocido en varias canchas y eso es por ser un seguidor fiel de su hijo Mauricio: "Falta que sea el utilero y armamos el plantel ja. Él está feliz, jugó ahí y salió campeón, se que cuando me ve, se siente feliz y si me ve con estos colores, mucho más y que ojalá suceda para, poder hacer la foto juntos".

Para terminar y como siempre hacemos, dejamos que los protagonistas se expresen libremente y esto nos decía Bucho: "Ojalá se de y pueda jugar en Los Andes. Quiero agradecer a los clubes que me llamaron, pero ganó el corazón. También a mi señora y mi hija, que me bancan en mis locuras y que siempre me apoyan en todo. Si se da, ojalá sea un buen año. Tampoco me quiero olvidar de los chicos, que hoy me recibieron muy bien".  Mauricio Tejeda tiene bien claro que es capaz de ir de las sierras a Los Andes para ser feliz.